El Informe de 2016 sobre la Financiación de Adquisiciones en Europa
realizado por DLA Piper, que entrevistó a más de 300 participantes del
sector europeo de la deuda, ha revelado que los prestamistas son optimistas.
El mercado se ve impulsado por el interés en las operaciones de compra de
activos y la necesidad de financiar dichas compras.
Es un buen momento para los prestatarios. Un 63% de los financiadores
encuestados señalan que disponen de objetivos de financiación de
adquisiciones más altos este año que en 2015.
Posiblemente, los financiadores alternativos cambien sus hábitos en cuanto
al otorgamiento de financiación, según la mayoría de los encuestados, con un
85% de ellos que piensan que los fondos de financiación alternativa buscarán
invertir en operaciones de mayor volumen durante el año que viene.
Probablemente, los bancos hagan lo propio: dos tercios de los encuestados
esperan un incremento en la capacidad de suscripción este año. Los fondos de
financiación alternativa son una parte cada vez más importante del mercado,
aunque es posible que se sobreestime la amenaza que representan para los
bancos.
La opinión común entre los encuestados es que en 2016 las estructuras
exclusivamente senior serán las más habituales en el mid-market
en Europa. Únicamente el 17% de los encuestados espera que las estructuras
de financiación de adquisición no bancaria más comunes este año sean los
high yield bonds, colocándolas como la tercera estructura más prevista,
detrás de las unitranche (50%) y mezzanine (17%). Mientras que
la liquidez fue buena en la primera mitad de 2015, el limitado flujo de
adquisiciones apalancadas mantuvo baja la emisión de high yield bonds,
como pasó con la salud del mercado de capitales, lo que supuso que muchas
operaciones dual-track acabaran estructurándose con salidas a bolsa
en vez de mediante emisiones de bonos.
César Herrero, socio del Área de Bancario y Financiero de DLA Piper afirma:
"Esperábamos que 2015 fuera un año de mucha actividad en España, como así ha
sido. Debido a una mayor liquidez y confianza económica, ha aumentado, sin
duda, el volumen de operaciones. La mayoría de las financiaciones se han
estructurado mediante deuda exclusivamente senior, con tramos de
refinanciación y de financiación de adquisición y, en algunos casos, con
tramos de financiación de circulante y capex. Los financiadores alternativos
se enfrentan al reto de ser tan activos en España como lo son en otros
países europeos, en un momento en que los bancos han incrementado
sustancialmente sus objetivos de financiación. Por otro lado, se empieza a
ver interés en financiar operaciones de adquisición mediante bonos".