El
letrado
jiennense
Javier
Carazo
recibió
anoche
la
Cruz
Distinguida
de
Primera
Clase
de
la
Orden
de
San
Raimundo
de
Peñafort,
la
máxima
distinción
que
puede
conceder
el
Ministerio
de
Justicia
a un
abogado
en
reconocimiento
a su
trayectoria
y
excelencia
profesional,
y la
Medalla
al
Mérito
Colegial,
concedida
por
el
Colegio
de
Abogados
de
Jaén.
Carazo
es
merecedor
de
estos
dos
reconocimientos
gracias
a
una
extensa
trayectoria
en
el
mundo
de
la
Abogacía,
una
profesión
que
viene
ejerciendo
desde
hace
35
años,
lo
que
incluye
más
de
dos
décadas
dedicado
a
servir
a
los
intereses
del
Colegio
de
Abogados
de
Jaén.
Además
de
su
trabajo
como
decano
jiennense
hasta
el
año
2011,
ha
formado
parte
del
Consejo
General
de
la
Abogacía
Española
y ha
sido
presidente
del
Consejo
Andaluz
de
Colegios
de
Abogados
(Cadeca).
En
2013
también
recibió
la
Gran
Cruz
al
Mérito
en
el
Servicio
a la
Abogacía,
concedida
por
el
Consejo
General
de
la
Abogacía
Española.
El
acto,
celebrado
en
el
salón
de
actos
de
la
entidad
colegial,
contó
con
la
participación
del
decano
del
Colegio
de
Abogados
de
Jaén,
Vicente
Oya;
el
presidente
del
Cadeca,
José
Pascual;
la
presidenta
de
la
Audiencia
Provincial
de
Jaén,
Elena
Arias
Salgado:
el
fiscal
jefe
de
Jaén,
Carlos
Rueda;
el
decano
del
Colegio
de
Procuradores
de
Jaén,
José
Jiménez,
y el
obispo
de
Jaén,
Ramón
del
Hoyo,
que
fue
el
encargado
de
imponer
a
Carazo
la
Cruz
de
San
Raimundo
de
Peñafort.
También
estuvieron
presentes
en
el
acto
la
mayoría
de
los
decanos
de
los
colegios
de
abogados
andaluces,
así
como
numerosas
autoridades
de
la
provincia
de
Jaén.
En
su
intervención,
Javier
Carazo
agradeció
al
Ministerio
de
Justicia
y al
Colegio
de
Abogados
de
Jaén
la
concesión
de
estas
dos
importantes
distinciones,
que
suponen
un
gran
honor
y un
aliciente
para
seguir
trabajando
como
abogado.
"Hay
muchos
compañeros
de
la
profesión
que
se
merecen
estas
distinciones
tanto
como
yo,
y
quiero
resaltar
que
mis
compañeros
han
sido
fundamentales
a la
hora
de
que
yo
pueda
obtenerlas",
expresó.
Hizo
mención
a su
padre,
"que
fue
el
que
me
hizo
ser
abogado
y
que
me
involucrara
tanto
en
el
Colegio",
a su
mujer
y a
su
hija,
estudiante
de
Derecho.
Por
su
parte,
Vicente
Oya
aseguró
que
Javier
Carazo
recibía
con
toda
justicia
dos
de
los
reconocimientos
más
importantes
para
un
abogado.
“Javier,
eres
una
pieza
esencial
para
nuestro
Colegio
y
para
la
provincia
de
Jaén,
y
hoy
estás
recogiendo
los
frutos
del
trabajo
callado
y
desinteresado
que
has
realizado
a
favor
de
la
Abogacía
durante
las
últimas
décadas”,
afirmó.
También
puso
de
relieve
que
personas
como
Javier
Carazo
“hacen
que
se
prestigie
la
profesión
y la
institución
colegial,
ya
que
se
trata
de
un
magnífico
profesional
comprometido
con
la
sociedad
y de
una
persona
honesta”.
Además,
José
Pascual,
actual
presidente
del
Consejo
Andaluz
de
Colegios
de
Abogados,
recordó
que
Carazo
desempeñó
este
mismo
cargo
“con
gran
dignidad.
Ha
sido
siempre
una
gran
persona
y un
magnífico
compañero”.
En
este
sentido,
destacó
su
amplia
trayectoria
en
la
Abogacía
y su
trabajo
institucional.
“Se
trata
de
un
reconocimiento
muy
merecido
el
que
recibe
hoy
Javier
Carazo”,
añadió.
También
intervinieron
en
el
acto
Elena
Arias
Salgado,
Carlos
Rueda
y
José
Jiménez,
que
coincidieron
en
destacar
los
méritos
profesionales
del
homenajeado. |