José Martí Ruano: “No podemos pretender asesorar a empresas de primer nivel y olvidarnos de su realidad: que a día de hoy es la digitalización.”

Publicado el lunes, 15 abril 2019

José Martí Ruano es socio co-fundador de Larrauri & Martí Abogados. Madrid, es Licenciado en Derecho por la Universidad de Deusto (1980) y ha llevado a cabo los Cursos Economía y Contabilidad en la Universidad de Deusto (1982-1984). Colegiado por el Ilustre Colegio de abogados de Madrid (1983) y por el de Bizkaia (1996).

Sus especialidades son el Derecho Mercantil, Fiscal, Internacional. A lo largo de su trayectoria profesional se ha especializado en procesos de salida a bolsa y de reestructuración y fusión de sociedades admitidas o no a cotización en bolsa, ha apoyado en la negociación y planificación fiscal de numerosas operaciones de adquisición y venta de empresas y sociedades así como en el diseño y creación de estructuras internacionales. Tiene amplia experiencia en la administración de empresas industriales por desempeñar o haber desempeñado el cargo de consejero.

JOSÉ MARTÍ RUANO Socio co-fundador de Larrauri & Martí Abogados

JOSÉ MARTÍ RUANO
Socio co-fundador de Larrauri & Martí Abogados

Hans A. Böck / @LP_Hans

Lawyerpress (P): Larrauri & Martí Abogados ha realizado una trayectoria de gran éxito en estos diez años desde su fundación. ¿Nos puede resumir brevemente los principales hitos en la historia del despacho?

José Martí Ruano (JMR): Sin duda haber sobrevivido a la famosa crisis doblando además nuestro volumen. Nos ha ocurrido que mientras que el resto del sector regularizaba la dimensión de su plantilla al decreciente volumen de clientes y de facturación, nosotros apostamos por aumentarla y conseguimos encontrar un hueco de asesoramiento en los procesos de crisis empresarial apostando por la competitividad en precios y sobre todo en la calidad del servicio.

Por lo demás, el traslado a la actual sede abandonando la histórica no solo ha modernizado nuestra estructura, sino que nos ha colado en la vanguardia de servicios en nuevas disciplinas.

P: Con tres oficinas en Madrid, Bilbao y Málaga atienden a PYMES y empresas más grandes. ¿Cuáles son los retos más importantes a los que se enfrentan sus clientes en la actualidad? Tenemos mucha regulación de Compliance o protección de datos.

JMR: Las empresas, que son nuestro principal foco de clientela, se enfrentan hoy en día a retos como la digitalización, la adaptación al uso de las nuevas tecnologías, la ciberseguridad, la innovación y en definitiva, al cumplimiento de una normativa que cada día es más diversa y amplia y que obviarla entraña demasiados riesgos. Por eso desde nuestro despacho, nos vemos en la necesidad primero de conocer muy bien sus negocios para así mantenerles muy informados y después de trabajar siempre el asesoramiento preventivo.

Sus retos se convierten en los nuestros propios, para adaptarnos a sus nuevas necesidades que pasan por que nos especialicemos en disciplinas que hace a penas 5 años ni existían.

El cliente es el principal motor y conductor de la innovación y nosotros hemos tenido que reaccionar a las necesidades derivadas de su propia transformación.

P: Larrauri & Martí Abogados también ofrece servicios a sus clientes a través de contactos internacionales. ¿Cómo esta organizada esta faceta en su despacho?

JMR: Aquí Antonio Lobón tiene mucha culpa de nuestro posicionamiento en los procesos de internacionalización de nuestros clientes, ejerciendo al más alto nivel en Nueva York durante casi treinta años, su conocimiento de los mercados y su experiencia liderando el asesoramiento a multinacionales, nos ayudan ofrecer un sólido servicio al cliente.

P: Cuando todo el mundo en el sector legal habla de la digitalización y del papel importante de la tecnología, vemos que su despacho ha incorporado una de las firmas más digitalizadas de España. ¿Cómo surgió la idea de incorporar Cysae a Larrauri & Martí Abogados?

JMR: Cuando te mueves en el negocio de la abogacía, con cierto nivel de clientes, te das cuenta de que si quieres seguir siendo competitivo o te renuevas o mueres. No podemos pretender asesorar a empresas de primer nivel y olvidarnos de su realidad: que a día de hoy es la digitalización.

Por este motivo hace ya casi 2 años en Larrauri & Martí tocó renovarse. Tuvimos además la gran suerte de cruzarnos en el camino con Cysae, a nuestro modo de ver, los mejores especialistas en España en temas de Blockchain y Legaltech. Un equipo de abogados, ingenieros y tecnólogos absolutamente especializado en asesorar en nuevas tecnologías y en el desarrollo de software legal, smart contracts y aplicaciones para despachos de abogados. De hecho han sido el primer equipo en España en sacar adelante una ICO (Initial Coin Offering).

P: Tener un departamento tecnológico y de una cultura muy “moderna” me parece que puede ser difícil de dirigir. ¿Cómo funciona el día a día entre ambas culturas de abogados?

JMR: A mi todo me pilla ya un poco de vuelta, pero confío en el equipo y mis socios suelen tener buenas intuiciones, con lo cual yo me dejo llevar.

Nosotros nos complementamos muy bien, las piezas se ensamblan y la maquina funciona. Cuando las cosas se complican en áreas de la abogacía más tradicional, evidentemente es a mi a quien acuden y les ofrezco mi consejo más maduro, pero en las nuevas áreas soy yo el que escucho y entrego la batuta a los que más experiencia tienen. No existe la lucha de egos sino el trabajo en equipo.

P: Cysae pertenece también al ELTA, una asociación europea que promueve la tecnología. ¿Cuál es el papel de la tecnología en un despacho como el suyo? ¿Veremos algún día al abogado robot?

JMR: Larrauri & Martí también pertenece a ELTA, y fíjate si creemos en el papel que va a jugar la tecnología, que gracias a Cysae nuestros clientes serán los primeros en poder disfrutar de una herramienta de votación en junta, por escrito y sin sesión, utilizando la tecnología blockchain. Además ya tenemos implantadas otras herramientas como docexpresso, o stamper, que nos permite sellar, cualquier tipo de archivo en blockchain. No se imagina el tiempo que ahorramos todos desde que las implantamos.

Por lo que respecta a nuestra organización interna, la innovación ha impactado en nuestra antigua estructura tradicional de despacho y propiciado un enfoque más colaborativo y en definitiva un cambio en nuestra cultura corporativa.

Me preguntaba si los abogados corríamos el riesgo de ser sustituidos por robots. Este supongo que es el miedo de muchos, pero nuestro equipo sabe que la tecnología ni les va a sustituir, ni les va a dejar sin empleo. Quizás si sustituya alguna de las tareas que ahora realizan (por ejemplo la revisión de jurisprudencia), pero esto les dará la oportunidad de situarse más allá y realizar tareas de mayor valor añadido, a parte de que les ayudará a mejorar: su trabajo diario, su rentabilidad y la experiencia del cliente al que asesoran.

Lo que ocurre cuando la tecnología, o la inteligencia artificial es capaz de mejorar el trabajo de un abogado, es que su uso supone una ventaja competitiva para quienes la utilizan. La justicia predictiva para mí que soy abogado de la vieja escuela, es el tema estrella de la innovación, una de sus aplicaciones más interesantes.

Es indiscutible que no tiene ningún sentido competir con una máquina a la hora de extraer patrones de millones de datos, pero aprovecharnos de las máquinas para ejecutar esa labor nos deja más tiempo para cuidar las relaciones personales. Esto es lo que en estos dos años he aprendido de mi equipo.

Sobre el autor
Hans A. Boeck

Editor y Director de Lawyerpress. Fundador del grupo Lawyerpress. Periodista con más de 30 años de experiencia en medios nacionales e internacionales. Idiomas: Español, alemán, inglés. Correo electónico: hab@lawyerpress.com y Twitter @LP_hans

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