El
Colegio
de
Abogados
de
Barcelona
(ICAB)
fue
el
escenario
escogido
por
la
Fundación
Instituto
de
Investigación
Aplicada
a la
Abogacía
para
llevar
a
cabo
la
presentación
del
Primer
Estudio
sobre
las
Patologías
y
Lesiones
de
la
Abogacía
en
España.
El
objetivo
de
este
estudio,
además
de
detectar
cuáles
son
las
enfermedades
que
más
afectan
a
los
letrados
derivados
del
ejercicio
de
la
profesión,
es
comparar
esta
situación
con
la
sociedad
en
general.
El
análisis
se
ha
realizado
a
partir
de
los
datos
facilitados
por
los
Colegios
de
Abogados
de
Catalunya,
Vizcaya,
Madrid
y
Málaga,
así
como
de
Alter
Mutua
de
Abogados,
MUSA,
Servicio
Médico
del
Colegio
de
Abogados
de
Madrid
y de
la
Mutualidad
de
la
Abogacía.
El
número
de
colegiados
ejercientes
en
España
es
de
147.775
(en
2013)
y en
Catalunya
de
23.515
(diciembre
de
2014).
El
informe
fue
presentado
por
parte
de
la
decana
emérita
del
ICAB
y
presidenta
de
la
Fundación,
Sílvia
Gimenez-Salinas,
y ha
contado
con
la
participación
del
presidente
de
Alter
Mutua,
José-Fèlix
Alonso-Cuevillas
y de
Joan
Barrubés,
director
asociado
del
programa
Executive
Máster
en
Dirección
de
Organizaciones
Sanitarias
de
ESADE
y
socio
director
de
Antares
Consulting.
Autor
del
estudio.
El
acto
contó
con
la
asistencia
del
decano
del
Colegio
de
Abogados
de
Barcelona,
Oriol
Rusca,
y
del
secretario
de
la
Fundación,
Manuel
Camas,
entre
otros.
Las
conclusio0nes
de
este
estudio
establecen
que
las
patologías
y
principales
lesiones
de
la
abogacía
en
España
están
relacionadas
con
la
traumatología
(con
un
20%
de
las
personas),
el
ámbito
psicosocial
-estrés
y
ansiedad-
(con
un
3%
de
las
personas)
y
los
accidentes
cardiovasculares
(con
un
1,5%).
El
estudio
considera
que
las
traumatologías
-especialmente
las
fisuras,
prótesis
y
ortopedias-
venían
derivadas
de
los
desplazamientos
que
realizan
los
abogados
en
el
ejercicio
de
su
profesión,
ya
que
son
un
colectivo
que
tiene
una
media
de
movilidad
más
alta
que
la
población
en
general.
Dentro
de
las
traumatologías
cabe
destacar
que
si
se
compara
con
los
datos
de
otros
estudios
se
establecen
en
segundo
término
las
causadas
a
consecuencia
de
ser
acosados
(un
37%)
por
encima
de
ser
agredidos
físicamente
(26%),
pero
en
el
caso
del
presente
estudio
esta
percepción
es
inferior.
La
segunda
causa
está
relacionada
con
el
ámbito
psicosocial
(estrés,
ansiedad...)
motivada
por
la
sensibilidad
y
preocupación
hacia
los
problemas
de
sus
clientes.
Dentro
de
este
ámbito
hay
que
destacar
que
la
duración
de
las
lesiones
es
más
larga
que
en
la
población
en
general.
Este
tipo
de
lesiones
crecen
con
la
edad
hasta
llegar
al
tope
de
los
45
años,
momento
en
el
que
comienzan
a
disminuir.
Además
también
hay
que
resaltar
que
las
solicitudes
de
los
más
jóvenes
requieren
de
apoyo
psicológico,
mientras
que
las
personas
de
mayor
edad
necesitan
ayuda
psiquiátrica.
Esta
situación
contrasta
con
el
funcionamiento
general
del
resto
de
la
sociedad,
ya
que
a
mayor
edad
más
crece
el
índice
de
estrés
y
ansiedad.
Otro
aspecto
a
tener
en
cuenta
es
que
el
índice
de
este
tipo
de
incidentes
es
inferior
al
que
manifiesta
la
población
en
general,
por
lo
que
el
estudio
considera
que
los
abogados
a
pesar
de
sufrir
estrés
o
ansiedad
no
siempre
recurren
a
pedir
ayuda
a
los
expertos
para
tratarse.
La
tercera
causa
que
afecta
a la
salud
de
los
abogados
está
relacionada
con
los
accidentes
cardiovasculares.
Estos
vienen
motivados
a
raíz
de
no
haberse
curado
o
tratado
los
problemas
psicosociales.
El
estudio
también
trata
sobre
el
impacto
de
la
entrada
de
la
mujer
en
el
ejercicio
de
la
abogacía
y,
en
concreto,
sobre
la
maternidad.
En
este
sentido
se
destaca
que
la
media
de
edad
de
la
mujer
gestante
abogada
es
entre
los
36 y
40
años,
4
años
superior
a la
edad
en
que
la
población
en
general
suele
tener
el
primer
hijo.
También
se
ha
registrado
que
los
abortos
se
producen
con
mujeres
con
una
media
de
edad
superior
al
de
los
partos
de
la
población.
Por
último
el
análisis
apunta
a
posibles
estrategias
de
prevención
con
el
objetivo
de
reducir
la
incidencia
y
prevalencia
de
estas
enfermedades.
En
cuanto
a la
traumatología
aconseja
que
los
abogados
"aparquen
los
temas
laborales"
cuando
realicen
desplazamientos,
así
como
seguir
buenas
prácticas
de
riesgos
laborales
en
la
oficina.
En
cuanto
al
ámbito
psicosocial
se
considera
que
en
los
grandes
despachos
deberían
llevarse
a
cabo
más
estrategias
de
trabajo
en
equipo,
mientras
que
en
los
despachos
más
pequeños
deberían
desarrollar
capacidades
para
asimilar
los
problemas
del
cliente,
la
asertividad
y la
gestión
del
tiempo.
|