Los mediadores tenemos la tendencia, lamentablemente justificada, de decir que
tenemos un problema para llegar al público en general. Es como si hubiera una
barrera. Se celebran acuerdos y colaboraciones, algunas instituciones se
implican más que otras, pero la realidad es que en más de una de las charlas que
se dan para difundir la mediación terminan por acudir más mediadores que
personas de a pie sin relación alguna.
Parece que la mediación sólo interesa a los mediadores.
Ante esa tesitura ¿por qué no sacamos más lustre a las noticias que con
cuentagotas se van publicando en medios no especializados? El ser humano basa
algunas de sus conductas en la imitación, ¿Quién no se ha comprado un pantalón
de “pata” ancha, y al año siguiente uno mucho más estrecho? ¿Quién no ha
adquirido una camisa de rayas, y al año siguiente sólo se pone aquellas cuyo
estampado es de cuadros chiquititos?.
Los famosos pueden ofrecernos esta oportunidad y además en distintos ámbitos.
Quizás el que más ha revolucionado las redes sociales de los mediadores ha sido
el de los
Thyssen, familia mediática que fue exponiendo el deterioro de la relación
entre la baronesa viuda y su vástago hasta dejarla inexistente, y que
finalmente, durante las pasadas navidades, nos obsequiaron con un posado felices
y contentos porque volvían a ser una familia.
No cabe duda que el desgaste de la relación madre-hijo era muy acusado y según
consta en los subtítulos de la noticia “Ha sido preciso, como en todas sus
últimas reuniones, un mediador entre ambos”.
Pero no son los únicos, el artista
Kiko Rivera, antaño conocido como Paquirrín, también ha sido usuario de
estos métodos de resolución extrajudicial de conflictos.
Fruto de su noviazgo con una modelo es padre de un bebé, pero por esos
derroteros por los que nos conduce la vida, ambos decidieron poner punto y final
a su relación sentimental.
Aunque en un principio y por el bien del hijo en común, quisieron hacerlo de
manera amistosa, la parte económica acabó enquistándose, produciendo cierta
tensión en la relación que incidía directamente sobre ellos y sobre su pequeño,
por lo que habiendo oído hablar de la mediación, decidieron buscar a un mediador
que les ayudase a resolver esta cuestión.
Pero si hay un personaje que copa la atención periodística, es un futbolista que
despuntó en el Nápoles, jugó en La Liga Española, es reconocido mundialmente por
su mano (de Dios) y experto en buscar controversias: Maradona.
Argentina nos lleva ya bastante ventaja en el uso de métodos alternativos de
resolución de conflictos, y la mediación tiene ya suficiente recorrido, por ello
el astro del fútbol no duda en acudir a un mediador para resolver asuntos como
el que tuvo con su
ex pareja por difundir unas fotos en las que salía sin cubrir su rostro o,
como el que tuvo con su
ex representante por la recreación de éste de su vida donde contaba
anécdotas entre las que figuraba alguna relacionada con el ex futbolista.
Además de personajes célebres, la mediación también ha llegado a las empresas.
El último, al menos del que yo sea consciente, ha sido la Empresa
Decathlon, bien conocida por todos por su especialización en material
deportivo.
El caso tiene su origen en un Convenio Urbanístico que consideró a una única
promotora e ignoró a los pequeños propietarios de los terrenos afectados, lo que
condujo a estos a presentar una demanda. Tras un largo proceso judicial, han
decidido recurrir a un mediador para solucionar la controversia.
Pero no es la única, la Casa de Modas
Balenciaga también ha recurrido a la mediación, en este caso han aceptado el
procedimiento que les ofrecía el Tribunal de Gran Instancia de París para
dirimir el contencioso que los enfrenta.
La Casa de Modas considera que su ex Director Artístico violó las condiciones
que figuraban en su contrato de confidencialidad al finalizar la relación
laboral que los unía y dar varias entrevistas en las que criticaba la estrategia
de su antiguo empleador.
Conflictos familiares, laborales, urbanísticos, son sólo una muestra de las
cuestiones que pueden someterse a mediación, ¿Cuál es el tuyo? |