Juan Ignacio Navas, socio-director de Navas & Cusí.
Desde Navas & Cusí nos felicitamos por la decisión de la Comisión Europea de denunciar ante Luxemburgo la pasividad de España. Nuestro país recibió un ultimátum el pasado mes de enero y el gobierno ni siquiera informó sobre los pasos que seguiría para subsanar y lograr una trasposición plena de la MiFID II.
Juan Ignacio Navas, socio-director de Navas & Cusí
Ante semejante pasividad, la Comisión ha optado por llevar el asunto ante Luxemburgo para que sea el Tribunal de Justicia de la UE quien fuerce a España a trasponer plenamente la directiva hipotecaria. Una directiva clave para la defensa de los derechos del consumidor bancario.
Luxemburgo tiene que garantizar la primacía del derecho europeo y su efectividad para que todos los ciudadanos -con independencia de que sus gobiernos hayan hecho los deberes en plazo- puedan disfrutar plenamente de los mismos derechos.
La MiFID II ofrece garantías muy relevantes para los clientes de instrumentos financieros y obligaciones de gobierno y transparencia que refuerzan las garantías. El consumidor español no tiene por qué pagar la pasividad de sus autoridades nacionales.
Directiva hipotecaria
Además, nuestro despacho lleva meses denunciando el retraso en la trasposición de la directiva hipotecaria, la 2014/17/UE. De momento Economía sólo ha presentado un anteproyecto, pero el trámite parlamentario no se ha iniciado y el plazo de trasposición terminó el 21 de marzo de 2016.
Se trata de una ley muy relevante porque obliga a todas las entidades financieras a informar con trasparencia del conjunto de ofertas existentes en el mercado de manera que el cliente pueda comparar y se produzca una verdadera transparencia en el mercado, haciéndolo más eficiente y seguro para todos.
Por eso reiteramos nuestra petición urgente de que la directiva hipotecaria sea traspuesta a la mayor celeridad”
